Alfadeca: Programa de Lectoescritura que reúne la experiencia en aula y las mejores prácticas de enseñanza a nivel mundial

  • En Chile cada año 60% de los niños y niñas que pasan a 2º básico no logran leer, esto en un escenario sin pandemia. Frente a este contexto es que la Fundación Sara Raier de Rassmuss desarrolló el Programa Alfadeca con el fin de disminuir estas cifras, creando un programa con una estructura aplicable en cualquier establecimiento.

 

Diseñar un sistema claro, motivador y eficaz que permita a los niños leer, escribir y comprender lo que leen al finalizar 1º básico fue una de las motivaciones que llevaron a la Fundación Sara Raier de Rassmuss (FSRR) a crear el Programa Alfadeca, metodología que contempla las mejores prácticas a nivel mundial sobre enseñanza y aprendizaje de la lectoescritura y las pone en el marco del contexto latinoamericano por Alix Anson, experta en temáticas de aprendizaje y titulada de la universidad de Cambridge.

 

“Todo el sistema de Alfadeca se puede resumir con la imagen visual de una casa. El camino hacia el éxito comienza con la combinación de los lados fonético y visual del cerebro, para construir la autopista neuronal que permitirá que el aprendizaje fluya. Las vocales representan la puerta de entrada a la alfabetización y las consonantes los cimientos firmes del proceso. Juntos se unen para formar sílabas que se convierten en las ventanas para abrir cualquier palabra nueva. La casa se refuerza, ladrillo a ladrillo, mediante el aprendizaje de las palabras de alta frecuencia y se protege con una práctica constante que actúa como techo para resistir la erosión del olvido”, agregó la experta.

 

Programa de Lectoescritura Alfadeca
Programa de Lectoescritura Alfadeca

De esta forma didáctica Alix Anson ha graficado la metodología Alfadeca, con el fin de que profesores y equipos de sala puedan comprenderla mejor y aplicarlas en sus salas de clases. “Si seguimos analizando nuestro dibujo, la luz del sol ofrece la fluidez en la lectura, que luego se combina con la riqueza de cada gota de vocabulario de lluvia de palabras nuevas. Estos son los ingredientes clave que permitirán que florezca el arcoíris de comprensión, creatividad y comunicación, con toda su riqueza de variedad y color. Si podemos construir esta casa con éxito, deberíamos tener alumnos, profesores, estudiantes y familias felices” puntualizó Alix.

 

Actualmente el Programa Alfadeca se ejecuta en nueve comunas, 75 salas de clase e impacta en la educación de 2.220 estudiantes. Durante el 2020 Alfadeca tuvo un excelente desempeño, los resultados de su evaluación final arrojaron que el 58% de los alumnos de 1º básico terminaron leyendo, porcentaje 18 puntos mayor que la media nacional en un año normal. Por otra parte, el 66% de los estudiantes de 2º básico finalizaron el año escolar comprendiendo lo que leen y 59% de niñas y niños lograron terminar el año escribiendo textos para transmitir sus ideas con claridad.

 

 

Los elementos clave del enfoque de Alfadeca, según Alix Anson, son:

  1. Un alfabeto único: las imágenes coinciden con la forma de cada letra. Esto genera un gancho, combinando ambos lados del cerebro.
  2. Código de colores en las letras: Las letras con colores enseñan rápidamente la silabificación y las habilidades de escaneo visual (vocales en rojo y consonantes en azul)
  3. Desarrollar la conciencia fonológica desde el principio permite a los alumnos decodificar nuevas palabras al leer y codificarlas al escribir.
  4. Enseñar sistemáticamente 10 palabras de alta frecuencia cada semana, esto construye rápidamente el banco de palabras de un niño.
  5. La creatividad es crucial: es el proceso mental más avanzado (taxonomía de Bloom) que involucra y potencia al cerebro a realizar algo más que copiar.
  6. Enseñar a escribir en manuscrita: técnica que permite desarrollar la memoria muscular de los estudiantes para escribir de forma fluida.
  7. La práctica constante es necesario para fortalecer las vías neuronales del alumno, para retener las habilidades ya aprendidas y para enseñar a los estudiantes rutinas semanales.
  8. Desarrollar la fluidez y el vocabulario: A un niño permite que la lectura se vuelva automática y conduce mejor a la comprensión.
  9. Las habilidades de comprensión deben enseñarse activamente, comenzando con respuestas orales y visuales e ir avanzando hasta las escritas.
  10. Mostrar a los alumnos, padres y profesores el camino para aprender a leer y escribir de modo que todos sepan exactamente dónde se encuentran en el proceso de aprendizaje y así poder celebrar cada paso.

 

 

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