Obtener el Sello de Excelencia Energética, certificarse bajo la Norma de Igualdad de Género, siendo la primera casa de estudios nacional en concretarlo, y trazar una estrategia a diez años, fueron algunos de los hitos de la UBO para fomentar el desarrollo sostenible.
Importantes progresos tuvo el 2021 la Universidad Bernardo O’Higgins (UBO) en su tarea de consolidarse como una institución de educación superior responsable social y medioambientalmente, que tiene como foco aportar a la mitigación de los efectos del cambio climático.

En 2014 la UBO dio los primeros pasos en el desafío de fomentar al desarrollo sostenible, creando el Centro de Investigación de Recursos Naturales y Sustentabilidad y a contar de esa fecha han sido diferentes los avances que han reafirmado ese compromiso. En 2021, específicamente, lograron importantes resultados en temas medioambientales, como son la obtención del sello de excelencia energética, la construcción de un nuevo edificio concebido totalmente de manera amigable con el medio ambiente y el proyecto piloto de instalación de paneles fotovoltaicos con sistema on grid, que será replicado en nuevos sectores de los campus. Asimismo, en temas sociales, el principal logro fue la certificación con la Norma de Igualdad de Género y Conciliación de la Vida Laboral, Familiar y Personal otorgado por AENOR, que la convirtió en la primera Universidad chilena en implementar un sistema de gestión con perspectiva de género. Adicionalmente, se han incorporado criterios de sustentabilidad dentro de todo el modelo educativo, reforzando las mallas curriculares de manera transversal con materias ligadas al desarrollo sostenible.

Dicho progreso, que es fruto del Plan Estratégico para una década de acción colaborativa, permitió que la UBO ingresara por primera vez al prestigioso ranking THE Impact, que mide el desempeño global de las instituciones de Educación Superior con respecto al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Junto con esa distinción, la UBO figuró en el ranking UIGreen Metric, que evalúa las políticas verdes en los campus de universidades de todo el mundo, incluyendo eficiencia energética, gestión de residuos, recursos hídricos, fomento del transporte no contaminante y educación ambiental. “Estamos orgullosos de nuestro desempeño, ya que hemos avanzado mucho y con resultados tangibles en menos de 5 años, frente a otras instituciones que cuentan con más de una década de acción. Esto, gracias a una clara y completa hoja de ruta que apunta a generar impacto y que nos pone metas ambiciosas en materia de sustentabilidad social, económica y medioambiental”, señaló Claudio Ruff, Rector de la Universidad Bernardo O’Higgins.

En ese sentido, para 2022 las principales tareas se relacionan con la implementación de un sistema de gestión energética para todos los campus, a fin de certificarse bajo la norma internacional en el primer trimestre 2023, iniciar la medición de la huella de carbono, realizar un diagnóstico para la movilidad sustentable y desarrollar un plan profundo de inclusión universitaria integral.

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