El proyecto fue impulsado por el sacerdote italiano Lorenzo Locatelli, quien vio la oportunidad de consolidar un espacio seguro y protegido donde los niños y niñas de la población El Duraznal pudieran hacer deporte y recibir valores.
La escuela de fútbol San José de Puente Alto fue uno de los diez proyectos de cuatro países ganadores del concurso “Juntos por un Mundo Mejor”, impulsado por la Reale Foundation en cuatro países: Chile, España, Grecia e Italia. Este espacio protegido para la práctica deportiva y la transmisión de los valores del deporte fue creado por el sacerdote italiano Lorenzo Locatelli, párroco de la capilla San José Obrero de la comuna metropolitana.
“Fue como un partido de fútbol. Estuvimos todo el día con los nervios de punta esperando por el cierre de las votaciones. Cuando éstas terminaron, tuvimos el presentimiento de que lo habíamos logrado. Motivamos a nuestros amigos en Italia, Chile, Francia, Estados Unidos, Alemania para que nos apoyaran”, cuenta Locatelli, quien lleva doce años en Chile como misionero de la congregación San Carlos Borromeo.
Su edición 2024 (cuyos ganadores se eligieron por votación popular a través de internet) es la primera que apoyará a proyectos fuera de Italia, ratificando el compromiso del Grupo Reale de proteger y cuidar a las personas y contribuir a un mundo mejor en los países en que se desempeña. La compañía peninsular Reale Seguros tiene operaciones en Chile desde 2017 y esta es su primera oficina fuera de Europa.
«Estamos orgullosos de ver cómo, a través del concurso, hemos conseguido implicar a nuestras comunidades en un viaje de participación activa y apoyo mutuo. Es un testimonio de nuestro compromiso con un desarrollo sostenible que no solo atienda las necesidades actuales, sino que siente las bases de un futuro más equitativo e integrador”, destacó Virginia Antonini, Directora de Sostenibilidad y Comunicación Institucional del Grupo Reale-.
Con el propósito de promover el impacto social positivo, “Juntos por un Mundo Mejor” se centró en las áreas de salud y bienestar, inclusión y desarrollo social y sostenibilidad ambiental, en sintonía con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de Naciones Unidas. Los triunfadores del certamen, solo uno de ellos chilenos, recibirán un aporte de 10.000 euros para poner en marcha acciones dirigidas a mejorar las condiciones de vida en sus respectivas comunidades.
Un impulso para el San José FC
Aunque cuatro agrupaciones chilenas se encontraban entre los 30 postulantes más votados, la Escuela de Fútbol San José –que se ha convertido en una opción educativa complementaria para muchas familias de barrios vulnerables– estuvo siempre entre los principales aspirantes al estímulo. El padre Locatelli cuenta que los recursos ayudarán a que la iniciativa, que partió como un voluntariado donde universitarios visitaban la población para jugar “pichangas”, siga avanzando.
“Usaremos el premio para crecer: comprar materiales, recompensar el tiempo del entrenador, pagar la inscripción a torneos e indumentarias. También, si es posible, mejorar la infraestructura de la cancha de la población donde jugamos, quizás pintarla. Hasta ahora nos hemos mantenido recibiendo donaciones, pero con esto el objetivo es poder consolidarnos. La escuela se ha convertido en un lugar protegido para los niños, donde el entrenador los educa dentro y fuera de la cancha”, cuenta el padre Lorenzo.
La Escuela San José acoge a 30 alumnos, en su mayoría niños, de entre seis y 16 años, que entrenan tres veces a la semana. Para el misionero y creador del proyecto, ha sido una oportunidad de evocar sus épocas como hincha de la Roma, el mítico club italiano donde brillara el campeón del mundo Francesco Totti. “Siempre fue mi equipo y crecí mirando a este fantástico jugador. Pero ahora mi club es el San José. Los niños están contentos y para nosotros sería un sueño que nos visitara Charles Aránguiz, hijo ilustre de Puente Alto, o el mismo David Pizarro, quien jugó varios años en la Roma junto a Totti”.
Equipo Prensa
Portal Educa