Pensar o imaginar la vida cotidiana sin acceso a internet parece hoy en día prácticamente imposible. La era digital nos ha empujado a construir experiencias cotidianas desde el mundo online y esto se hace más real para las nuevas generaciones, quienes, desde que nacen, se han vinculado con su entorno desde lo digital.
Esta revolución tecnológica se ve también en las salas de clases de nuestro país. Según PISA 2023, las distracciones en clase por el uso de smartphones y otros dispositivos explicaron que los estudiantes obtuvieran 15 puntos menos en matemática, equivalente a perder tres cuartas partes de lo aprendido en un curso. Cifras que se vuelven más alarmantes cuando sabemos que en los países OCDE, un 65% de los estudiantes de 15 años que rindieron la prueba en 2022 dijeron haberse distraído con su celular u otros dispositivos.
A pesar de lo anterior, y probablemente para la sorpresa de muchos, la recomendación de los expertos de PISA no es prohibir los celulares en las salas de clases, aun cuando países como Nueva Zelanda, Francia e incluso China sí han adoptado medidas restrictivas al respecto. Desde su perspectiva, la prohibición puede ser incluso contraproducente, considerando que el mundo online es parte de nuestra vida cotidiana.
En Chile no contamos con un marco legislativo sobre el uso de estos aparatos en la escuela, siendo las propias comunidades educativas las que han tomado decisiones al respecto. El desafío que tenemos es observar la irrupción de la tecnología como parte de la realidad y comprender el fenómeno social que reviste el desarrollo integral de las y los estudiantes como ciudadanos digitales en un mundo hiper informado.
El acceso a internet representa una oportunidad única para abordar la equidad y la justicia social en el sistema educacional. Hoy es posible acceder a información relevante y explorar lugares que en un mundo offline estarían totalmente fuera de alcance. Ofrecer a nuestros estudiantes la oportunidad de ser exploradores de un mundo globalizado, despertando su curiosidad, pensamiento crítico y aportando con un conocimiento colectivo es permitirles desarrollarse como líderes de un futuro con un propósito para sí mismos y su comunidad.
Esta perspectiva es la que mueve a Enseña Chile. Apoyamos el desarrollo del liderazgo colectivo en docentes para que, junto a sus comunidades educativas, puedan abordar desafíos complejos de manera colectiva y contextualizada. Creemos que las soluciones deben nacer desde las propias comunidades y el conocimiento pleno de sus aspiraciones, fortalezas y complejidades.
En nuestra apuesta, el uso y propósito de la tecnología en la sala de clases reviste una obligación intrínseca de las comunidades educativas, siendo un pilar para desarrollar el máximo potencial de las y los estudiantes en la sociedad del siglo XXI. Cada comunidad educativa tiene la oportunidad de soñar la educación que sus estudiantes necesitan para lograrlo y, a través de nuestra experiencia, hemos reafirmado la convicción que al interior de cada una de ellas existen docentes, estudiantes y personas que construyendo relaciones con otros, serán capaces de liderar la transformación educativa, siendo así embajadores de esta revolución digital, que permitirá construir un mejor futuro para su comunidad y para otros.
Equipo Prensa
Portal Educa