A casi dos años de iniciada la pandemia, cerca del 80% de los establecimientos educacionales han retomado las clases presenciales, si bien es una noticia positiva y que nos llena de esperanza, aún un número importante de estudiantes en el país no han podido retornar a la “normalidad”, por temas de aforo o por no contar con la infraestructura requerida, como es el caso de muchos de los establecimientos subvencionados y municipales.
Según un estudio realizado recientemente por la Universidad de Chile y la Pontificie Universidad Católica, un porcentaje importante de alumnos -cerca del 27%- continúan con clases online o asistiendo solo una vez a la semana de manera presencial, pese a que estamos “desconfinados”. Sin duda, esta cifra no nos debe dejar indiferentes.
El Covid-19 marcó un antes y un después y hoy es primordial seguir avanzando en la implementación de los sistemas híbridos -Blended- que combinen la enseñanza sincrónica y asincrónica en escenarios presenciales y remotos, potenciando las habilidades de los alumnos y fortaleciendo el desarrollo profesional de los equipos pedagógicos. Para ello, es fundamental trabajar fuertemente en el tema de la conectividad y acortar las brechas del aprendizaje.
El desafío está en preparar a los estudiantes para el futuro. En este sentido, el sistema educativo debe adaptarse a las nuevas necesidades y utilizar las plataformas de aprendizaje para manejar y desarrollar la educación digital de manera personalizada, disponiendo de forma intuitiva y amigable los contenidos digitales, las herramientas de evaluación formativa y gestión académica.
Ximena Álvarez, Gerente Servicios Educativos Santillana Compartir.
Equipo Prensa
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