- Las emociones pueden ser agradables o desagradables, cumpliendo un papel importante cada una de ellas, es por eso que puede afirmarse que no existen emociones ni buenas ni malas. Todas son fundamentales para el desarrollo integral de niñas y niños. Se encuentran presentes desde el momento de la gestación y a medida que vamos creciendo éstas se constituyen en un ámbito fundamental del desarrollo, pues van entregando señales respecto de situaciones y de vínculos que permanecerán a lo largo de la vida.
Es así que tempranamente puede experimentarse miedo frente a una situación que nos hace sentir en peligro, lo que nos enseñará a cómo cuidarnos y protegernos. Por otra parte, la felicidad que podría sentirse en una interacción amorosa y respetuosa con otra persona favorecerá, por ejemplo, reforzar vínculos seguros.
La felicidad es una emoción agradable y que nos genera placer. En el imaginario colectivo existe la creencia de que niñas y niños siempre deben estar felices, y que no deberían experimentar emociones desagradables como la pena. Esto puede invitar a que las adultas y adultos estemos en un permanente estado de sobre preocupación y auto exigencia por generar estos espacios de felicidad, aminorando la importancia que tienen las otras emociones en el desarrollo integral de niñas y niños.
En esa misma línea, las adultas y adultos podemos tender a pensar que existe una única forma de experimentar la felicidad, por ejemplo, satisfacer materialmente el deseo de lo que quieren obtener niñas y niños mediante el consumo de productos disponibles en el mercado. La felicidad no es una emoción que surge solo por una acción, cada niña o niño sentirá felicidad por la valoración que haga de lo que suceda en su entorno: un abrazo amoroso, compartir lo que aprendió en el jardín infantil, jugar juntos, por ejemplo.
En este Día Internacional de la Felicidad podemos reflexionar: ¿Qué hace felices a niñas y niños? ¿Cómo sabemos que están felices? ¿De qué manera puedo contribuir a generar momentos felices?
La invitación para las adultas y adultos es comprender que todas las emociones son importantes para el desarrollo integral de las niñas y niños.
Acompañar el desarrollo integral de niñas y niños desde lo emocional, implica prestar atención para comprender en qué momento de éste se encuentran y desde ahí acompañar a reconocer, nombrar y comprender las propias emociones, expresar y modular las emociones de forma adaptativa, valorando la propia singularidad, junto con establecer interacciones armoniosas, inclusivas y respetuosas. Esto pudiera ser un desafío para todas y todos quienes interactuamos diariamente con niñas y niños, y tenemos la responsabilidad de criarles, cuidarles, educarles y protegerles.
En el Día Internacional de la Felicidad, les invitamos a valorar la felicidad y todas las emociones que pueden sentir niñas y niños, para favorecer su bienestar, desarrollo pleno y amoroso; a reconocer lo que a ellas y ellos les hace felices, y cómo estar disponibles para acompañarles.
Si tienes dudas sobre la crianza y desarrollo emocional de niñas y niños, no dudes en contactar a Fonoinfancia al teléfono 800200818 o al chat en www.fonoinfancia.cl
Por Rodrigo Cordero González, psicólogo, Supervisor del Departamento de Promoción y Fonoinfancia, Dirección de Promoción y Protección de la Infancia, Fundación Integra.
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