- Especialistas de distintos países se reunieron en Santiago para analizar los desafíos de las instituciones que entregan formación a distancia en torno a la calidad e innovación educativa.
- La arremetida de la Inteligencia Artificial promete revolucionar procesos fundamentales, como las clases prácticas y las evaluaciones.
Santiago, 27 de enero 2025.- En Latinoamérica, Brasil lidera con un 50% de las matrículas online en educación superior, mientras Chile se destaca por ser uno de los países donde esta modalidad va en permanente ascenso, alcanzando un 12,4% de la matrícula total de pregrado en 2024, lo que significa un aumento de 11,8% respecto a 2023. Más abajo se encuentran Argentina con un 5,0% y Uruguay con -1,0%.
En el caso de Chile, el crecimiento exponencial de la formación técnico-profesional online, que alcanza a 126 mil matrículas (201,2% entre 2020 y 2024), hace crucial una conversación acerca de los desafíos de las instituciones para garantizar la calidad de la enseñanza, tema que se analizó en profundidad en el seminario “Calidad de la educación online: temas y desafíos claves en el mundo del e-learning”, organizado por el Instituto Profesional Iplacex, que contó con la participación de expertos del mundo público y privado.
Según datos del Ministerio de Educación, este aumento ha sido constante en los últimos años, desplazando cada vez más a quienes anteriormente optaban por la educación vespertina.
En esa línea, Gonzalo Donoso, jefe de la División de Educación Superior Técnico Profesional del Mineduc, comentó que “necesitamos avanzar hacia estándares normativos y de calidad. Para eso es imprescindible contar con regulaciones que permitan progresar y desterrar la idea que la educación presencial es mejor que la virtual. ¿Por qué? Porque la educación debe ser consistente con el avance tecnológico”.
Los expositores internacionales fueron el director del Instituto de Perfeccionamiento y Estudios Superiores (IPES) de Uruguay, Claudio Rama; el vicerrector para el Aprendizaje Digital de la Universidad Central de Florida, Estados Unidos, Thomas Cavanagh; y el director de la empresa de EdTech Anthology, Nicolaas Matthijs.
El primero de ellos, con una dilatada trayectoria que incluye la autoría 17 libros sobre educación y tecnología, abordó desafíos como la disminución de las horas presenciales en actividades prácticas y las evaluaciones.
“Si bien la matrícula de estudios online en Latinoamérica ha crecido, no sé cuánto ha avanzado la evaluación, ya que ha habido mucha resistencia. Estamos viendo cómo la IA está resolviendo dos problemas: la práctica con los simuladores y la evaluación. Ese es el gran desafío de la innovación: cómo se puede crear un sistema donde se hagan pasantías, prácticas, simuladores y mecanismos con los cuales se obtienen competencias”, reflexionó Claudio Rama.
El representante de la Universidad Central de Florida, Thomas Cavanagh, complementó afirmando que “los programas online pueden decaer cuando no existe consistencia, por lo que se debe potenciar la interactividad y las herramientas de feedback”.
Si bien los especialistas coincidieron en que la Inteligencia Artificial es un gran aliado en materias de educación, para Nicolaas Matthijs, de Anthology, el máximo potencial de esta tecnología requiere de la supervisión humana. “La evidencia ha mostrado que los estudiantes que asisten a clases donde el profesor ha intervenido, y es él quien presenta la materia, tienen mejor rendimiento académico que cuando la presentación es creada y dictada por IA. Por eso se debe encontrar el punto de equilibrio para que la IA sea una oportunidad”, comentó el experto.
El Instituto Profesional Iplacex ya ha desarrollado algunos programas que incorporan esta tecnología para materias prácticas. Así, por ejemplo, en carreras como Técnico en Electricidad o Ingeniería en Construcción cuentan con simuladores que permiten a los estudiantes realizar actividades que pongan a prueba sus conocimientos.
El rector del Instituto Profesional Iplacex, Roberto Barriga, explicó que “hemos visto un aumento en nuestros estudiantes, lo que puede explicarse por dos factores: En primer lugar, la calidad de la educación que entregamos, que al ser de excelencia nos permite atraer a quienes deseen continuar con su formación, aunque ya estén trabajando. Lo segundo es la tecnología, que nos ha permitido desarrollar buenos programas formativos, donde la flexibilidad es una herramienta de movilidad social”.
Link del seminario: https://www.youtube.com/watch?v=Pm5_4VYgt-c