Compitieron en Uruguay
- Con el propósito de educar el emprendimiento desde la etapa escolar, Junior Achievement desarrolla el desafío «La Compañía» en 9 países de Latinoamérica, para que jóvenes desde los 15 años puedan desarrollar un negocio y potenciar sus habilidades en torno a una idea creativa y capital de inversión. En Chile, los finalistas fueron del Colegio San Ignacio de Loyola de Illapel, representado por el equipo FIJA, que desarrolló papel reciclado.
El programa «La Compañía» es una iniciativa de Junior Achievement que se realiza en escolares mayores de 15 años de 9 países de Latinoamérica y que busca desarrollar habilidades de emprendimiento y educación financiera. Este año, un equipo de 4 alumnos de primero medio del Colegio San Ignacio de Loyola de Illapel, fue el representante chileno en la final COY (Compañía del Año, por su sigla en inglés) realizada en Montevideo, Uruguay; junto a otros 77 competidores de la región. El equipo chileno FIJA desarrolló una línea de productos a base de pulpa de papel reciclado.
Dirigidos por su profesor jefe, el desafío asignado en la asignatura de tecnología, buscó que los estudiantes desarrollasen un producto en base a un modelo de negocio que resolviera alguna problemática. El programa «La Compañía» considera componentes de planificación y acción, evaluación de riesgos, trabajo en equipo, creatividad, comunicación y perseverancia. Asimismo, incluye la participación en rueda de capitalización para reunir un capital inicial, feria de emprendimientos y conversaciones inspiradoras a modo de mentorías.
«Donde la creatividad comienza en el papel» es el slogan del producto FIJA, un negocio sustentable que debe su nombre a las iniciales de sus creadores de solo 15 años; Florencia Jorquera (gerente general), Isidora Gallardo (director de finanzas), Jorge González (product manager) e Isidora Villalobos (directora de marketing). Cada uno desde su rol, trabajaron durante año para idear un producto y materializarlo como negocio.
«Primero íbamos a crear joyas y como el material no era muy accesible, decidimos usar papel, algo que se desecha a diario y que está en casi todas las casas. Decidimos licuar el papel desechado y luego pasarlo por unos bastidores y prensarlo, ponerlo en moldes y secarlo; así creamos papel y añadimos tintes naturales y artificiales, hojas y pétalos, y hasta madera. Nuestro producto es papelería, tarjetas de saludos y otros productos de decoración», explica Isidora Gallardo.
«Aprendimos sobre muchos detalles que involucra hacer un negocio que ayudara a la problemática ambiental y que desconocíamos. En mi casa me apoyaron y encontraron muy novedoso el programa, hasta me dieron ideas. Cuando fuimos a competir en Uruguay, eso sí, me di cuenta de que otros emprendimientos estaban mucho más maduros que el nuestro y tenían más integrantes. En el proceso de preparar nuestro negocio, disfruté mucho diseñando el logo que transmitía la identidad del producto y viendo las publicaciones en redes sociales», señaló Jorge.
Si bien disfrutaron la experiencia de emprender, los jóvenes chilenos señalan que a futuro les gustaría innovar con otros productos y conseguir más capital. Ya aprendieron cuáles son las etapas y las habilidades que deben tener como equipo, así como también valoraron la importancia de las redes de colaboración.
Junior Achievement es una institución sin fines de lucro con presencia en más de 100 países del mundo, y existe hace 105 años, registrando 17 millones de experiencias educativas. Constituye la sexta organización no gubernamental con mayor impacto social del mundo, según el ranking de The Dot Good. Este año, fue nominada por tercer año consecutivo al Premio Nobel de la Paz, por su compromiso de mejorar la calidad de vida de la humanidad a través de la educación y sólo en Latinoamérica; capacita a más de 2 millones de jóvenes en 26 países en educación financiera, preparación para el trabajo y emprendimiento. Más información en www.jachile.org
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