El sondeo indica que las mujeres muestran un mayor interés en libros de ficción, mientras que los hombres optan por textos sobre artículos en línea e historia.
Un reciente estudio de Corpa Estudios de Mercado analizó los hábitos de lectura en la Región Metropolitana, revelando cómo el género, edad y nivel socioeconómico influyen en los patrones de lectura.
La investigación, que encuestó a 700 personas de los niveles socioeconómicos C1C2 (medios altos) y C3D (medios bajos y bajos), muestra que la lectura sigue siendo una actividad relevante para la mayoría de la población, con un 85% que considera que leer es “muy importante” en su vida diaria.
En detalle, el 38% de los hombres y el 34% de las mujeres leen diariamente, mostrando una leve predominancia masculina en este hábito. En cuanto a las diferencias por edad, la lectura diaria alcanza su mayor frecuencia entre las personas de 45 a 55 años (44%), mientras que en los grupos más jóvenes las cifras son menores: 33% en el rango de 18 a 24 años y 35% en los de 25 a 34 años y 35 a 44 años, evidenciando una tendencia al aumento del hábito lector con la edad.
“Desde una perspectiva psicológica, la lectura tiene un impacto directo y positivo en la salud mental, ya que reduce el estrés y la ansiedad al proporcionar una vía de escape de las presiones cotidianas, permitiendo sumergirse en mundos ajenos, especialmente a través de la ficción. Además, la lectura favorece un mejor manejo emocional, pues al involucrarse en las historias y dramas de otros, los lectores obtienen una perspectiva externa que les permite reflexionar sobre sus propias dificultades afectivas, al tiempo que fomentan la compasión tanto por las experiencias ajenas como por las propias”, señala la psicóloga y economista Paula Vásquez, de CORPA
Contenidos más leídos: ficción, artículos y académicos
Las preferencias lectoras varían significativamente según el género. Mientras las mujeres muestran un mayor interés en libros de ficción, los hombres optan por artículos en línea, textos históricos y diarios. También destaca entre los hombres jóvenes, la lectura de manga y cómics.
Por otro lado, las personas de niveles socioeconómicos C1C2 tienden a leer más artículos en línea, contenidos académicos y libros de no ficción en relación con los segmentos medios C3D.
“Los grupos socioeconómicos más altos leen con mayor frecuencia artículos en línea y académicos, reflejando una lectura más compleja. Mientras que los segmentos medios o bajos leen más libros de ficción e historia” señaló Castillo.
Formatos preferidos: el papel domina, pero los dispositivos electrónicos ganan terreno
El papel continúa siendo el formato preferido, con el 65% de las mujeres y el 55% de los hombres eligiéndolo, aunque los dispositivos electrónicos están ganando relevancia: un 35% de los hombres y un 28% de las mujeres utilizan dispositivos móviles para leer; el computador es empleado por el 25% de los hombres y el 14% de las mujeres; y los libros electrónicos cuentan con una valoración equitativa entre ambos géneros.
“Llama la atención que el segmento etario que menos prefiere el libro impreso son los mayores de 45 años y destacan por la preferencia de dispositivos móviles para la lectura. Por otro lado, los segmentos C1C2 son quienes más prefieren los libros impresos” señala Pavel Castillo, Gerente de Intelligence en CORPA.
Géneros literarios: las mujeres prefieren las novelas y romances, mientras que los hombres la historia o ciencia
Donde más se evidencian diferencias entre los grupos es por el gusto de qué géneros leer. Por un lado, en las mujeres destaca el gusto por el romance (31%), las novelas (29%) y el drama (23%), mientras que los hombres destaca la historia (42%), ciencia y tecnología (35%) y ciencia ficción (33%).
También existen importantes diferencias por edad, por ejemplo, llama la atención que los más jóvenes de 18 a 24 años prefieren el romance (38%), el terror (30%), misterio y suspenso (27%) y el drama (27%). En la otra vereda, los mayores de 45 años prefieren la historia (42%), y ciencia y tecnología (35%).
“Desde la psicología —y en términos generales— las mujeres suelen encontrar una mayor identificación en narrativas que exploran la empatía, los conflictos emocionales y las relaciones interpersonales, permitiéndoles explorar su propia emocionalidad a través de las experiencias de los personajes. En cambio, los hombres tienden a preferir géneros como la historia, ciencia y tecnología, asociados a una visión más objetiva y racional del mundo, reflejando su inclinación por enfoques más analíticos y menos enfocados en la emoción”, indicó Vásquez.