En Chile anualmente realizamos grandes esfuerzos para promover y fomentar el emprendimiento. Por poner solo de ejemplo a una institución de varias, en Sercotec, de acuerdo a su cuenta anual, en 2022 se destinaron 103 mil millones de pesos en fondos concursables, asesorías, capacitaciones y otros para emprendedores y pymes en nuestro país.
Lo anterior, está espectacular. Pero, ¿qué pasa en la educación básica, media y universitaria? Quiero que reflexionemos sobre la importancia de sembrar las semillas del emprendimiento mucho antes, integrándolas profundamente en nuestro sistema educativo desde las etapas más tempranas. Quizás, en vez de enfocar todos los recursos solo en instituciones como Sercotec, podríamos incluir el emprendimiento en la educación desde temprano. Así, preparamos a nuestros jóvenes para que sean los innovadores y líderes del mañana.
El emprendimiento es mucho más que iniciar un negocio; es una mentalidad, un conjunto de habilidades y, sobre todo, una forma de vida. Al incluir el emprendimiento como materia en el sistema educativo, no solo estamos enseñando a los estudiantes a crear una empresa en Chile, sino que también estamos sembrando las semillas de la innovación, la resiliencia y la autonomía.
La habilidad de venta, por ejemplo, es super importante al emprender. No se trata únicamente de convencer a alguien para que compre un producto, sino de entender las necesidades, comunicar efectivamente el valor de una propuesta y forjar relaciones duraderas con los clientes. Estas competencias son indispensables no solo para los futuros empresarios, sino para cualquier profesional en el mundo actual.
Por otro lado, el manejo del dinero y la contabilidad son aspectos cruciales que todo emprendedor debe dominar. No basta con tener una idea brillante; es necesario entender cómo gestionar tus recursos, maximizar ingreso, minimizar costos, y así asegurar la sostenibilidad y el crecimiento del negocio. Enseñar finanzas personales y contabilidad en el contexto del emprendimiento proporciona a los estudiantes una comprensión profunda de cómo el dinero fluye dentro de una empresa y cómo tomar decisiones informadas que garanticen su éxito a largo plazo.
En Chile, donde la cultura emprendedora está en pleno auge, es crucial que nuestro sistema educativo se alinee con el mercado y prepare a los estudiantes no solo para ser empleados como lo hemos estado haciendo desde siempre, sino para ser creadores de empleo. Integrar el emprendimiento en el currículo no solo potenciará la creación de nuevas empresas, sino que también desarrollará una generación de jóvenes capaces de adaptarse a los cambios, enfrentar desafíos y liderar con innovación.
Desde DeNegocios.cl, promovemos la visión de que todos podemos emprender. Creemos firmemente que al dotar a nuestros jóvenes con conocimientos en venta, contabilidad y gestión financiera, estamos no solo fomentando la creación de nuevas empresas, sino también fortaleciendo el tejido económico y social de Chile. El emprendimiento enseña a pensar fuera de la caja, a ser resilientes ante el fracaso, a perseguir incansablemente nuestros objetivos y por sobre todo a ser mejores.
Equipo Prensa
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