Nuestro país si bien enfrenta una disminución de su preferencia en los niños y jóvenes, en los últimos informes del Consejo Nacional de Televisión (CNTV), la TV se mantiene como el medio preferido para el consumo diario de noticias y telenovelas en las familias. Esto entrega evidencias sobre su vigencia en la generación de opinión pública y en la consolidación de contenidos masivos de entretención.
El auge de plataformas de streaming y las redes sociales digitales, ha transformado radicalmente la modalidad de consumo de la televisión tradicional, obligando a los canales
tradicionales a innovar en contenidos y narrativas, a adaptar sus temáticas y estrategias publicitarias a nuevas generaciones y en modificar su integración a las plataformas y redes digitales con nuevos relatos, dinámicas de interacción y lenguajes que vinculen la TV con contenidos que se consumen en diferentes momentos, velocidades y formatos.
En la actualidad, el acto de ver televisión no es pasivo ni permanente como lo era hace un par de décadas, sino que es altamente exigente en cuanto a la fragmentación de las preferencias de los usuarios, a la multiplicidad de pantallas, y a la búsqueda de relatos personalizados y en multiplataforma.
Muchos académicos proyectan que la televisión del futuro será una experiencia híbrida, multiplataforma e interactiva, altamente personalizada en contenidos, debido a las preferencias de cada espectador y con una extendida convergencia mediática, con una base de información sobre cada individuo.
La televisión representa para muchas personas, una ventana abierta al mundo y una compañía familiar cotidiana, por eso es clave mantener el rigor en su realización, el estándar ético y la calidad de las informaciones y entretención que entrega. Es el gran medio, que permite visualizar en directo, lo grandes hechos nacionales e internacionales, y eso es muy difícil de reemplazar en otras plataformas. Además, es necesario revisar y potenciar su rol, como apoyo en la educación, generadora de comunidad y como una útil herramienta de formación ciudadana. Por eso, es vital su rol público, el apoyo privado y de la ciudadanía, en este ecosistema mediático actual.
Dr. Manuel Rivera
Secretario Académico de la Facultad de Comunicación, Historia y Ciencias Sociales de la UCSC





















