Bernardita Fuentes, académica de la Escuela de Educación de Párvulos UANDES, recomienda las actividades al aire libre, leer cuentos, cocinar y realizar juegos que estimulen la creatividad.
Comienza el tan anhelado descanso de verano. Meses para que los más pequeños de la casa puedan recargar energías para enfrentar un nuevo año escolar. Es aquí donde surge la pregunta, ¿Cómo aprovechar mejor el tiempo y que no pierdan el ritmo? ¿De qué manera entretenerlos durante sus vacaciones? Bernardita Fuentes, académica de la Escuela de Educación de Párvulos de la Facultad de Educación de la UANDES, nos propone varios consejos y recomendaciones para realizar durante los meses de verano.
Lo primero que dice la especialista, es ser más flexible con los horarios. “Quedarse en pijama más tiempo en la mañana y acostarse más tarde de manera de poder compartir más en familia”. Cocinar en familia dándoles roles específicos a los niños/as que no supongan riesgo como, por ejemplo, hacer brochetas con trozos de fruta, preparar helados caseros con jugos en polvo, lavar lechugas u otros para hacer ensaladas. Ya que así se resguarda una alimentación saludable, se comparte con los hijos y se fortalece su autonomía. Además, “es muy enriquecedor compartir estos momentos conversando con ellos, ya sea de los alimentos que se están consumiendo, lo que les gustó del día anterior, de un momento feliz que recuerden”, añade Fuentes.
Otra idea que plantea la académica de la UANDES es realizar actividades al aire libre, “son importantes ya que potencian la actividad física, el ejercicio de habilidades finas y gruesas y “botar” una buena dosis de energía. El goce al aire libre les da la posibilidad de vincularse con el entorno, compartir con otros niños o adultos y expresarse libremente en entornos amplios que permiten multiplicidad de acciones”, dice.
Para refrescarse, Fuentes propone una “batea” con agua y distintos recipientes plásticos de diferentes tamaños. “¿Quién no ha gozado de una tarde de juego en el barro? Busquemos ropa que no nos importe que se ensucie y ¡listo! Goce asegurado”, comenta.
Y, ¿Qué hacemos en casa? Bernardita Fuentes recomienda la lectura de cuentos diarios, ojalá 10 minutos por día, y la visita a bibliotecas municipales, cuyo acceso es gratuito y donde generalmente disponen de buen material para los más chicos del hogar.
Otros consejos prácticos:
- Tener materiales de desecho como cajas de remedios (diferentes tamaños), conos de papel higiénico, botellas plásticas, diarios, scotch, tapas de botellas y plumones. Dejen que la creatividad fluya y permitan un poco de desorden. Antes de comenzar acuerden que el orden será un trabajo en equipo.
- Masa: con harina, un poco de sal y agua tibia formar una masa que los invitará a crear y ejercitar su motricidad fina. Pueden agregar un poco de colorante para alimentos o témpera para darles color.
- Puzles y juegos de salón: son una magnífica instancia para compartir con los padres y hermanos. A través del juego de reglas aprenden a controlar sus emociones, a perder y ganar, y el manejo de la frustración. Se sugieren juegos como: bingo, ludo, dominó, cartas Uno o tradicionales, el gato, entre otros, además de esta manera los niños estarán menos expuestos a las pantallas.
Equipo Prensa
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