Por Daniela Elgueta, PhD. gestora de innovación Grupo Zenit.
Este 11 de febrero se cumplen 10 años desde que celebramos por primera vez el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, instancia para visibilizar el trabajo de muchas a la largo de la historia.
En Chile, la iniciativa Más Mujeres Científicas (+MC) ha logrado que cada vez más jóvenes elijan carreras científicas y tecnológicas, entrando este año más de 1.500 jóvenes a carreras STEM mediante los cupos de este programa. Asimismo, cada vez hay más iniciativas que buscan acortar las brechas y hacerse cargo de ellas desde etapas tempranas, trabajando directamente con niñas.
Iniciativas como Inspiring girls, Ingeniosas, Technovation Chile, Provoca, Girls in Quantum y Amuji, incentivan el interés de las niñas hacia las STEM, conectándolas con modelos femeninos a seguir a través de charlas, talleres y mentorías.
De la mano con este propósito, Grupo Zenit creó la plataforma ALAS (Aurora Lab Academy for Skills), que en estos meses busca fortalecer el desarrollo profesional integral en investigadoras, emprendedoras y gestoras tecnológicas. No sólo entrega herramientas para la postulación a fondos para la investigación y el desarrollo de proyectos de I+D+i+e, sino también genera una red de mentoría y colaboración entre mujeres en ciencia para impulsar carreras de alto impacto.
ALAS es una plataforma innovadora con enfoque integral y personalizado. A través de clases y talleres especializados, las participantes adquieren herramientas estratégicas en áreas clave como gestión de proyectos de I+D, transferencia tecnológica, financiamiento y liderazgo. Estas instancias no sólo brindan conocimientos teóricos, sino que también fomentan la interacción con expertas y la aplicación práctica de estrategias efectivas en el desarrollo de sus carreras y emprendimientos.
Sabemos que el impacto de la participación femenina en STEM no sólo se traduce en equidad, sino también en innovación y progreso social. Las mujeres en ciencia y tecnología aportan nuevas perspectivas y soluciones creativas a problemas globales, desde el cambio climático hasta el desarrollo de tecnologías sostenibles y la mejora de la salud pública. Promover su inclusión no es sólo una cuestión de justicia, sino una estrategia clave para abordar los grandes desafíos de nuestra sociedad con mayor diversidad y eficacia.
Programas como este, demuestran que el cambio es posible y que no basta con motivar a más niñas y mujeres a estudiar carreras STEM; también debemos asegurar que existan espacios para su desarrollo y liderazgo. La ciencia y la tecnología necesitan la mirada diversa de las mujeres, y como sociedad tenemos la responsabilidad de garantizar que el talento femenino no se pierda en el camino.
Hoy celebramos los avances, pero también reafirmamos nuestro compromiso con el futuro. La transformación está en marcha, y es tarea de todos acelerarla. Las estadísticas muestran que las mujeres participan de gran parte de los emprendimientos de base científico tecnológica, no obstante, el género carece de iniciativa para asumir su liderazgo. Ciencia se escribe con “C” de Cambio y Creatividad, pero también de Conciencia del potencial femenino. Atrevámonos!