La convivencia armónica y el deporte son ejes claros para la salud mental de niños, niñas y jóvenes, ya que, entre otros factores, fortalecen los vínculos de apoyo y generan un mayor sentido de pertenencia en la comunidad escolar.
Chile. Octubre de 2025. Con motivo del Día Mundial de la Salud Mental, la red de colegios Cognita Chile -que integra a Pumahue, Manquecura, American British School y The Greenland School-, revela que la convivencia armónica y la práctica deportiva son ejes clave del bienestar en la vida escolar. Estos no solo potencian el aprendizaje, sino que también actúan como factores protectores de la salud mental de niñas, niños y adolescentes al fortalecer vínculos de apoyo, promover la regulación emocional y fomentar hábitos activos sostenibles en el tiempo.
La psicóloga y Coordinadora de Programas Formativos de Cognita Chile, Vanessa Gálvez Ávila, subraya que fortalecer interacciones positivas y promover el deporte son herramientas imprescindibles para el desarrollo socioemocional. “La evidencia muestra que los vínculos de apoyo y las actividades físicas disminuyen significativamente la ansiedad, fortalecen la autoestima y generan un mayor sentido de pertenencia en los estudiantes”, explica.
Además, el bienestar emocional de los estudiantes depende, en gran medida, de cómo se sienten en sus comunidades educativas. Un clima de respeto, inclusión y diálogo abierto contribuye a prevenir conductas de aislamiento, hostilidad o tristeza sostenida, ofreciendo a los jóvenes espacios para expresarse sin temor al juicio y encontrar redes de apoyo genuinas. En este marco, resulta fundamental la detección temprana de señales de alerta como el aislamiento social, los cambios bruscos de comportamiento o la dificultad para integrarse a los grupos, activando los protocolos internos y el trabajo coordinado con las familias para evitar escaladas de mayor complejidad.
Junto con la convivencia, la actividad física regular se confirma como una aliada de la salud mental y del desempeño académico. El deporte favorece la concentración y la adquisición de hábitos de estudio, a la vez que entrega herramientas concretas para gestionar emociones difíciles. “El deporte fomenta la disciplina, el trabajo en equipo y la resiliencia. Más allá del resultado, cada logro fortalece la confianza en sí mismos y les enseña a enfrentar los desafíos con una actitud positiva”, enfatiza Gálvez. En los colegios de la red, los programas deportivos se articulan con estrategias de educación socioemocional para desarrollar competencias de autocuidado, regulación emocional y manejo del estrés académico, coherentes con la etapa de desarrollo y los intereses de cada curso.
Para que la convivencia y el deporte se traduzcan en prácticas sostenibles y protectoras, Cognita Chile promueve acciones integradas en la rutina escolar: instalar espacios de diálogo y construcción de acuerdos al interior de los cursos; impulsar actividades colaborativas deportivas y recreativas de comunidad; incorporar rutinas regulares de movimiento adaptadas a edades e intereses; habilitar entornos seguros para compartir emociones y experiencias cotidianas; y reconocer los logros colectivos, valorando los procesos más allá de los resultados individuales. Estas medidas, cuando se implementan de forma consistente y con participación de docentes, estudiantes y familias, fortalecen la cultura escolar y mejoran la calidad del clima de aprendizaje.
“La salud mental de los estudiantes no depende únicamente de factores individuales, sino también de la calidad de sus relaciones y de los contextos donde se desarrollan. La convivencia escolar y los deportes son espacios privilegiados para sembrar resiliencia, propósito y bienestar en su vida diaria”, concluye la psicóloga.
En este Día Mundial de la Salud Mental, Cognita Chile reafirma su compromiso de acompañar a cada estudiante en su desarrollo integral y de consolidar comunidades educativas que aprendan a convivir y a cuidar el cuerpo como pasos fundamentales para construir un futuro pleno y con propósito.