A la fecha, sólo ocho colegios de la comuna cuentan con la acreditación del modelo de prevención comunitaria que busca generar cambios ambientales para reducir el consumo de sustancias en la población menor de 18 años.
Promover una conciencia social en niños, niñas y jóvenes sobre la importancia de los problemas, los daños, costos personales y sociales relacionados con el consumo de drogas y el alcohol, fue la tarea que implementó el Colegio San Esteban Diácono de Vitacura.
En este contexto, la institución educativa implementó diversas iniciativas para instaurar el diálogo entre los estudiantes respecto a esta problemática, complementado con actividades atractivas que hicieron más dinámico el trabajo de orientación.
Frente a esto, el colegio recibió la certificación creada por el Modelo Islandés de Vitacura, con el fin de reconocer todas aquellas acciones, estrategias y actividades que contribuyen a la generación de cambios ambientales en los colegios participantes.
Lorena Oviedo, directora de Desarrollo Comunitario de la Municipalidad de Vitacura comentó que “esta certificación busca reconocer el trabajo de cada colegio respecto de los lineamientos que da el modelo. En este compromiso encontramos que cada uno desarrolla un plan de acción para poder abordar las temáticas de prevención de alcohol y drogas. Permite establecer distintas normativas y acuerdos de cuidados de la infancia, en beneficio de los estudiantes”.
“El modelo islandés existe en la comuna de Vitacura desde el 2019. la municipalidad en esos años visitó Islandia para capacitarse y llevar adelante este modelo. Luego se sumó el Gobierno a través del programa Senda. Vitacura fue el pionero y precursor de este modelo que busca generar cambios en nuestros jóvenes, evitando el consumo de alcohol y drogas. Es muy importante que en el modelo participe toda la comunidad educativa, es decir, los alumnos, los profesores, los directivos, y las familias”, añadió.
El Colegio San Esteban Diácono obtuvo certificación básica, con el compromiso de seguir avanzando hacia la intermedia. “Estamos muy contentos por el trabajo colaborativo que se realizó desde el equipo de psicoorientación y profesores, trabajando desde Playgroup hasta cuarto medio. Creo que podemos avanzar hacia un colegio libre de alcohol y drogas, y seguir trabajando en retrasar el consumo después de la mayoría de edad. Es fundamental, por el desafío que tenemos, seguir construyendo juntos una vida sana, sosteniendo buenas prácticas en el tiempo”, destacó Ángela Cañón, directora del Colegio San Esteban Diácono.
Islandia sorprendió al mundo bajando significativamente el consumo de tabaco, alcohol y drogas en menores de 16 años. Este modelo, que hoy se replica en Chile y en diversos países del mundo, está basado en padres involucrados y actividades deportivas y culturales, sello que mantiene el Colegio San Esteban Diácono y que ha dado positivos resultados.
Este modelo de prevención comunitaria busca generar cambios ambientales para así reducir el consumo de sustancias en la población menor de 18 años.
La certificación se enmarca en una de las líneas estratégicas del Modelo Islandés para el 2023: “Espacios escolares libres de alcohol”.
Equipo Prensa
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